¿Aran-qué-qué? ¡Arancini! Estos bocaditos celestiales rellenos de arroz y queso originarios de Sicilia dicen haber sido creados en el siglo X cuando Italia estaba bajo reinado árabe. Aprovechando el risotto que sobró, si es que es posible tal hazaña, esta suerte de coixinha tana es una bomba termonuclear de sabor explosivo.
Los mejores de la ciudad se comen en 1688, pero si tenemos en la heladera un tupper de risotto o incluso (¡oh wows!) un arroz kesu que no quiso ser tortillita esperando una metamorfosis culinaria, el proceso es sencillo y el resultado, más sublime que paisaje mediterráneo.
En este caso, una pequeña olla de risotto de frutos de mar (prometo receta pronto) que calculamos para un batallón evolucionó en unos arancini de mariscos, crocantes por fuera y rellenos del mejor descubrimiento del ser humano: arroz con cantidades industriales de queso cremoso derretido.
Los camarones, mejillones y calamares del risotto le dan un toque extra playero a la receta, y el hecho de que las fotos son de las últimas vacaciones en Uruguay acentúan su conexión con el agua salada de mar y el sonido de las olas rompiendo.
Pareciese que el verano fue hace siglos ya en esta época del año, pero si hay manera digna de honrarlo es complaciendo el antojo de fritanga con cuarenta grados de calor, si se puede, con una cervecita helada o una caipirinha potente y mojando los pies aunque sea en la pelopincho.
Este post va con delay y mucho amor desde República Dominicana donde estoy disfrutando (demasiado) mis últimas vacaciones de a dos, a sólo tres meses de la llegada de la bebé. La verdad que no quería dejar de compartir recetas con ustedes ni una semana, así que espero volver aún más inspirada y con algún ingrediente para probar con ustedes.
Vieron qué mucho les quiero. Casi casi tanto como a los arancini. Tanto que si no usas sobras y preparás arroz con queso solamente pensando en esta receta, no te juzgo ni un poquito.
Arancini de playa Imprimir
10 mins
20 mins
30 mins
- 2 tazas de risotto o arroz kesu
- 200 gramos de queso reggianito o parmesano
- 3 huevos
- 1 mazo de perejil
- 1 taza de harina
- 1 taza de galleta molida
- 1 cuchara sopera de paprika
- Sal y pimienta
- Aceite para freir
- Mezclar en un bowl el arroz, un huevo, una cuchara sopera de harina, el queso rallado fino y el perejil picado. Condimentar con sal y pimienta.
- Con las manos mojadas, formar pequeñas bolas y pasar por harina.
- Batir los huevos en un plato y condimentar con sal, pimienta y paprika. Pasar las bolitas por el huevo y luego apanar con galleta molida. Pasar los arancini nuevamente por el huevo y volver a apanar para que queden extra crocantes.
- Calentar el aceite en una sartén honda. Cuando el aceite esté bien caliente, freir de a poco los arancini, dejando secar en papel absorbente una vez que estén dorados.
- Consumir inmediatamente; mientras más pronto, más ricos.