Soy una súper mamá cuando necesito estar con mis amigas y olvidarme de la maternidad
Y también fui súper las veces que tuviste fiebre y no dormimos
Cuando manejo un poco más despacio para tener un minuto más sola
Y cuando salgo y miro tus fotos y te extraño
Fui súper mamá cuando lloré mares por volver a trabajar
Cuando te pusieron en mis brazos y no sentí esa magia instantánea
Súper las veces que sentí que quizás no había nacido para ser madre
Pero igual te tuve cerca, te conocí y te di todo de mí
Cuando te traje a nuestra cama para dormir un poco más
Y fui egoísta y te saqué la teta para volver a sentirme mía
Hasta cuando siento que me apuré en ser mamá, soy súper
Súper mamá cada vez que te miro, orgullosa de que existís
Cuando recién llegaste y no supe qué hacer, quién era, en qué me había convertido
Y fui súper porque sobreviví
Porque acá sigo.
Fui súper porque tuve miedo de perder todo al tenerte
De dejar de ser yo misma
Y hoy soy yo, y ya no soy la misma
Me obligaste a reinventarme, a ser súper, a ser todo
Soy una súper mamá
De las que odian limpiar, pero te cocinan con todo el amor que tienen
Que a veces se olvidan cuándo tenías doctor
Y te pone la tele para hacer sus cosas,
Que no sabe si te está malcriando,
Y tampoco sabe qué es criar bien.
Soy una súper mamá que a veces hace todo súper mal
Pero sobre todo soy súper porque hago lo mejor que puedo
Y ser súper es lo único que me sale de adentro
Feliz día de la madre a todas las súper mamás!
Risotto de calabaza y rúcula Imprimir
25 mins
60 mins
1 hora 25 minutos
- ½ kilo de calabaza
- Dos cucharas soperas de aceite de oliva
- Una cuchara sopera de azúcar morena
- Media cebolla
- Una taza de arroz arborio o carnaroli
- ⅓ de taza de vino blanco
- 4 a 6 tazas de caldo vegetal (o agua salada)
- 2 cucharas soperas de manteca
- 1 taza de queso parmesano
- Un atado de rúcula
- Sal y pimienta
- Extra queso para arriba
- Precalentar el horno a 180 grados. Partir las calabazas a la mitad y retirar las semillas. Espolvorear con azúcar, aceite de oliva sal y pimienta. Cocinar en el horno por 20 minutos. Retirar del horno y reservar.
- Hervir el caldo en un recipiente y apagar. Reservar.
- Calentar una cuchara de aceite en una olla. Picar la cebolla bien fina y dorar en el aceite por unos minutos.
- Vaciar con una cuchara las calabazas y agregar el puré a la olla. Mezclar.
- Una vez que el puré haya tomado temperatura, agregar el arroz revolviendo con cuidado. Después de tres minutos, agregar el vino blanco.
- Una vez que el vino se haya evaporado, ir agregando el caldo de a cucharones, siempre revolviendo con cuidado. Mezclar continuamente para que el arroz no se pegue al fondo.
- Cocinar por 20 minutos aproximadamente. Apagar el fuego y agregar la manteca y el queso. Revolver y dejar reposar por cinco minutos.
- Servir inmediatamente con unas hojas de rúcula, queso parmesano, pimienta recién molida y un chorrito de aceite de oliva.