El mac `n cheese es el arroz kesu de las pastas; suave, cremoso, un mimo maternal para la panza hambrienta y el alma adolorida. Si hasta ahora nunca en la vida te aventuraste a cocinar nada, no hay mejor comienzo que éste.
Mi mejor amiga gringa/paraguaya que vivé en Perú (y en Panamá y acá) es una gran nómada y trotamundos desde chica. Su comida favorita: macaroni and cheese. Mi regalo/tarea en este post: Enseñarle mi receta especial de este clásico comfort food de su natal Jersey, y quizás lograr que se anime a cocinarlo ella solita alguna vez.
Aunque tiene tías y abuelas en Asunción, sus papás viven lejos y los años nos convirtieron en más que amigas, familia. ¿Y cómo demuestra su amor la familia? Retándote, preocupándose, haciéndote pasar momentos incómodos y sobre todo, cocinando cosas ricas. Mimar a alguien con su comida favorita es (para mí) la manera más pura de demostrar cariño. Quizás por eso las mamás lo hacen tan bien.
Tras 200 lomitos robados de quinces, queso port salut metido de contrabando al cine (estábamos a dieta), papas fritas y jugo en sobre comprados en la farmacia de madrugada y mi primer In ´N Out, poca gente en este mundo me conoce tanto, en lo bueno y en lo no tan bueno.
Si por obra y gracia de los antiguos dioses mayas sobra al día siguiente un poco de este manjar, se transforma en una picada explosiva apta para acompañar un cajón de cerveza helada. Cero desperdicios. Yo cocinaría luego de más con tal de que sobre un poco. Y de paso tener una excusa para tomarse una fría (como si fuese que en esta casa necesitamos más razones para tomar cerveza.)
De verdad ninguna manera más acertada de festejar una amistad de 17 años. Love u Nat.
P.D. Les espero en mis Historias Destacadas del Instagram, donde pueden ver un paso a paso de esta receta.
2 x 1 de Mac 'n Cheese Imprimir
20 mins
30 mins
50 mins
- Un paquete de fideos codito o caracol
- Media taza de sal
- Dos cucharas soperas de manteca
- Una cebolla
- 1 diente de ajo
- 500 grs. de crema agria (o crema de leche)
- 170 grs. de queso cheddar
- 200 grs. de queso sardo o provolone
- 1 cuchara sopera de mostaza
- Pimienta a gusto
- El mac n cheese de anoche
- 3 huevos
- 1 paquete de queso rallado
- 1 taza de harina
- 2 tazas de panko
- Aceite en spray
- Poner a hervir dos litros de agua. Agregar la sal (sin miedo) que ayudará a saborizar la pasta y logrará acentuar la intensidad de la salsa. Cocinar la pasta según las indicaciones del paquete. Colar, agregar una cuchara de manteca y reservar.
- Picar el ajo y la cebolla bien finos. Calentar en una olla pequeña una cuchara sopera de manteca. Agregar el ajo y cebolla y dejar cocinando hasta que empiecen a dorarse.
- Bajar el fuego y agregar la crema y la mostaza. Revolver.
- Rallar el queso provolone y cortar el cheddar en cubos pequeños. Agregar a la salsa y revolver de tanto en tanto para que se derrita bien.
- Mezclar la salsa con la pasta. Disfrutar en el momento, o para un extra de potencia, agregar queso rallado por encima y meter al horno para gratinar. Si no se consume todo en el momento, guardar en un tupper en la heladera.
- Sacar la pasta de la heladera. Una vez que esté a temperatura ambiente, agregar queso rallado, un huevo y el panko. Mezclar bien.
- Formar bolitas de pasta con las manos mojadas.
- Pasar por harina, luego por el huevo batido, y luego por panko, creando una suerte de croquetita.
- Repetir hasta terminar con el fideo. Cocinar a fuego alto en el horno con un poco de aceite, o en caso de preferirlo, freírlas en aceite bien caliente.
