Salteado oriental de shitake con arroz

Oriente tiene tantos sabores como cultura y pobladores. Este salteado de hongos shitake se inspira en un lejano pueblo sin nombre, que probablemente existe sólo en mi imaginación, donde los arrozales se extienden hasta lo que deja ver el horizonte y los moradores viven vidas duras pero simples, sin mucho contacto con el exterior, ensimismados en las tradiciones de los ancestros.

Conozco China, Japón, Camboya y Tailandia sólo a través de Netflix y Youtube. Disfruto de las bizarras publicidades japonesas, me intriga el pop coreano que revoluciona al mundo y fantaseo con comer sushi en el restaurant de Jiro en la añeja estación de subte en Tokyo. Amo la moda de las chicas harajuku, a Pikachu y Hello Kitty, pero sobre todo, admiro y respeto su cultura gastronómica.

La inmigración muchas veces viene acompañada de problemas económicos, diferencias socioculturales, discriminación y xenofobia. No sé cómo no nos damos cuenta que el movernos como culturas por el mundo es lo que nos hace humanos, nos cambia el chip. Porque el que viene de lejos tiene una visión distinta de la realidad, de lo que le rodea, aprecia lo que nosotros tomamos por sentado desde ojos configurados de manera distinta.

Poco y nada tiene que ver con comida oriental, pero hoy almorcé como los dioses en Monte Líbano. Y mientras me relamía engullendo falafel y labne sólo podía pensar en lo lejos que están los inmigrantes libaneses de su tierra de origen, y lo agradecida que estoy de tenerlos cerca para disfrutar sólo un poco de sus tesoros culinarios.

Me encantaría que pase lo mismo con nuestra gastronomía algún día y nuestro vori, sopa paraguaya y pastel mandi’o lleguen a los lugares más recónditos del planeta. Que algún día seamos como Perú o México, con tesoros culinarios que se reinventan según el punto geográfico donde se encuentran.

¿Cuál será el plato que nos llevará al reconocimiento mundial? ¿Arroz kesu? ¿No?

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Tiempo de preparación
60 mins

Tiempo de cocción
30 mins

Tiempo total
Una hora y media

Precio: $$$

Dificultad: Fácil

Porciones: Dos porciones grandes

Ingredientes:

• Una cuchara sopera de aceite de girasol
• Una cucharita de té de aceite de sésamo
• 100 gramos de hongos shitake secos
• Una cebolla
• Un locote verde
• Un diente de ajo
• Una cucharita de jengibre picado
• Una zanahoria
• 12 cucharas soperas del líquido de los hongos
• 1 cuchara sopera de salsa de soja
• 1 cucharita de té de sriracha
• 1 cuchara sopera de azúcar morena
• 1 cuchara sopera de pimentón
• Media naranja
• Medio mazo de cebollita de hoja
• Flores comestibles para decorar

¿Qué hago?

1. Lo primero es hidratar los hongos. En una olla pequeña, poner a hervir un litro de agua. Apagar el fuego y colocar los hongos. Dejar hidratando por lo menos una hora.

Tip: Mientras más tiempo se hidraten los hongos, mejor sabor y textura tendrán. Lo ideal es hacerlo la noche anterior a cocinar la receta.

1. Una vez hidratados los hongos, retirar del agua y escurrir. Reservar el agua que quedó y cortar los hongos en láminas finas.
2. En una taza o recipiente pequeño, mezclar el agua de hongos, salsa de soja, sriracha, azúcar, pimentón y jugo de naranja. Reservar.
3. Calentar un wok a fuego alto. Colocar el aceite de girasol y sésamo.
4. Echar los hongos a la sartén sin revolver ni dar vuelta. Cocinar durante 3 minutos sin tocar.

Tip: La idea aquí es dorar los hongos. Lo ideal es que no se encimen y que así profundicen su sabor. Aunque cueste, ¡no revolver!

1. Agregar la cebolla cortada en tiras. Ahora salpimentar y revolver los hongos con la cebolla.
2. Añadir el ajo y el jengibre. Cortar el locote y la zanahoria en tiras finas. Agregar al wok y cocinar durante 2 minutos.
3. Inmediatamente agregar la mezcla de salsas y especias. Cocinar hasta que la salsa se reduzca por completo y las zanahorias se hayan ablandado del todo.
4. Apagar el wok y servir con arroz hervido. Decorar con cebollita de hoja y flores comestibles.