En casa de mi mamá nunca se tomó pira caldo, pero desde chica recuerdo escuchar a mi tía contar que los alumnos de la facultad solían pasar por el viejo Lido a tomarse un plato antes de rendir. La misma tía siempre me decía que el pescado tiene mucho fósforo y que era bueno por eso.
Yo no podía entender cómo podía haber fósforos dentro del pescado.
Recién a mis veintes probé mi primer pira caldo y lamenté que no haya sido parte de mi vida antes. Una sopa que explota de sabor, que te levanta el ánimo, la energía, y bueno, dicen que otras cosas también.
Ahora que ya soy grande, junto con la sopa de poroto manteca, se volvió un clásico de mi casa; una de esas sopas que curan todos los males; diseñadas especialmente para aliviar cuerpos cansados o corazones rotos.
Te amo pira caldo. Gracias por existir.
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10 min
40 min
50 min
- Una cuchara de aceite
- 400 gr de pescado
- Una cebolla
- Un locote
- Dos dientes de ajo
- Una cucharita de sal
- Una cuchara de sazonador Fisher Land de La Victoria
- Dos tomates
- Un litro de agua o caldo
- 100 gr de Queso Paraguay
- 100 ml de crema de leche
- Perejil o cilantro para decorar
- Calentar el aceite en una olla y dorar el pescado de ambos lados. Retirar de la olla y reservar.
- Agregar cebolla, locote y ajo a la olla. Condimentar con sal y aderezo Fisher Land. Cocinar unos minutos hasta que las verduras se ablanden y se doren un poco.
- Añadir los tomates picados. Cocinar unos minutos y agregar un litro de agua o caldo y dejar hervir por unos 20 minutos.
- Reincorporar el pescado a la sopa y bajar el fuego al mínimo. Luego de unos minutos, agregar el queso y la crema de leche. Apagar el fuego y dejar reposar 15 minutos antes de servir.
