El dulce de guayaba es mucho más rico que el dulce de leche; y sí, dije eso en voz alta. Con la gata más curiosa del mundo, mi Kitchenaid y un cuerpo que padece el frío polar, hoy cociné un bizcochuelo diseñado para comer bajo la frazada con un rico cocido caliente. Si la frazada es de tigre, todavía mejor.
¿Soy de las que se ponen bufanda ni bien baja de 20 grados? Soy. Y con este viento rompehuesos olvídense de verme fuera de la cama.
Yo sé que nunca hace frío en Paraguay y que las escuetas semanas donde no podés cocinar un huevo frito en el asfalto duran poco, pero como me cuesta existir con cuatro capas de abrigo, inmovilizada como Michelin en una casa helada.
¿Lo único que me gusta del frío? Comer. Comer mbeju, chocolates, sopas, fondue, pastas, y ahora, este bizcochuelo que solo se pone más rico con una cucharota de dulce de guayaba casero encima. Nos vemos en el verano, ahora vuelvo a mi cueva.
Bizcochuelo de guayaba Imprimir
10 min
50 min
Una hora
- Media taza de azúcar blanca
- 150 gr de manteca a temperatura ambiente
- 3 huevos
- Ralladura de una naranja
- 6 cucharas de dulce de guayaba
- 200 ml de yogur griego o natural
- Dos tazas de harina
- Una cucharita de polvo de hornear
- Batir el azúcar con la manteca en la batidora eléctrica hasta formar una mezcla cremosa, unos 4 minutos a velocidad media/alta.
- Incorporar los huevos y batir 3 minutos más, hasta integrar.
- Agregar la ralladura de naranja, dulce de guayaba y yogur. Batir unos minutos más.
- Tamizar la harina y el polvo de hornear y batir a velocidad media/baja solo dos minutos hasta integrar y que no queden grumos.
- Colocar la mezcla en un molde para budín o bizcochuelo enmantecado. Golpear contra la mesada para evitar que se formen burbujas de aire.
- Cocinar en horno precalentado a 180 grados durante 50 minutos, o hasta que al introducir un escarbadientes en el centro del bizcochuelo, éste salga limpio.
- Dejar enfriar unos minutos antes de desmoldar. Disfrutar con un rico dulce de guayaba casero.