Tarta de ricota, morrones y aceitunas

Ahora mismo no sé si hay vuelta atrás ni si voy a recuperar las hermosas fotos de esta tarta. La tecnología nos juega en contra. Esto es todo lo que tenía escrito en Word el martes, terrible día donde se esfumó todo vestigio de esta deliciosa tarta de ricota, aceitunas y morrones. Y pensar que hasta la masa había hecho desde cero.

Lastimosamente no escribí todos los pensamientos que se me cruzaron en el momento que la tarjeta de memoria decidió dejar de funcionar e hizo desaparecer como por arte del mismo Belcebú las fotos de mi hermosa tarta.

Estaba tan pirevaí que era capaz de tirar la computadora por el balcón. Hoy, habiendo hecho de nuevo las fotos (y la tarta) sólo me acuerdo llegar a tal punto de frustración que incluso pensé degenerar nomás ya esto del blog, que era una gran pérdida de tiempo.

Nunca pensé que un pedacito de plástico y metal podía arruinarme el día de tal manera.

Por suerte, pasaron dos días y mi locura temporal cesó. Pero no sin darme cuenta lo dependientes que somos de la tecnología. Ni hablemos de la relación viciosa que tenemos con el celular, donde sin darnos cuenta nos pasamos sumergidos viviendo más a través de las redes que en el mundo real.

Yendo a un concierto para terminar viéndolo en una pantalla de 5 pulgadas mientras filmamos un story, juntándonos a merendar con una amiga para que cada una se pase revisando el Twitter, dejar que la comida se enfríe encontrando el ángulo perfecto para subirlo al Instagram (acá me declaro culpable).

Pero, por otro lado, Corazón de Arroz sólo existe gracias a la tecnología. A la cámara digital con la que saco las fotos, la compu donde estoy escribiendo este texto, el disco duro externo donde están almacenadas miles de fotos y recetas, el internet que hace que puedas estar leyendo esto ahora mismo estés donde estés.

Huir de la tecnología no es la solución. Pero emprender la búsqueda de un balance sano sí.

Al final hice unos ajustecitos a la receta, saqué fotos mejores (creo) y hasta aproveché el incidente para hacer un video paso a paso para el Instagram. Y por supuesto, pude volver a disfrutar una tarta sabrosa, liviana y llena de sabor.

Después de todo, agradecí al cosmos por esa tarjeta de memoria fallada. ¡Pero que sea la última vez!

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Tiempo de preparación
15 mins

Tiempo de cocción
25 mins

Tiempo total
45 mins

Precio: $$

Dificultad: Medio

Porciones: Una tarta mediana

Ingredientes:

Para la masa (rinde para 3 tartas medianas)

• 300 grs. de harina integral
• 1 cucharita de polvo de hornear
• 1 cucharita de sal
• 1 cucharita de orégano
• 1 huevo
• 5 cucharadas de aceite común
• 2 cucharas soperas de semillas de sésamo

Para el relleno

• 200 grs. de ricota
• 1 huevo
• 1 locote rojo
• ¼ de taza de aceitunas verdes
• 2 cucharas soperas colmadas de queso crema light
• ¼ de taza de agua (más o menos)
• Orégano a gusto

¿Qué hago?

Para la masa

1. En un bowl grande, incorporar la harina integral, polvo de hornear, sésamo, sal y orégano. Mezclar con una cuchara.
2. Hacer un pequeño hoyo en el medio y agregar el aceite y el huevo. Empezar a mezclar con las manos. De a poco ir agregando agua hasta lograr una masa de consistencia firme que no se rompa ni se pegue a las manos.
3. Guardar en la heladera envuelta en papel film, o puede congelarse por un par de meses sin problema.
4. Cubrir un molde para tarta con aceite en spray. Esparcir con los dedos una capa fina de masa y rellenar a gusto. Tip: En la procesadora es cuestión de introducir todos los ingredientes y procesar hasta que la masa se haya unido.

Para el relleno

1. Primero, prender la hornalla y colocar el locote encima, dejando que se queme y ennegrezca, dando la vuelta cada 5 minutos hasta que toda la superficie se encuentre quemada. También puede hacerse al horno, cocinándose a fuego alto en la parte baja durante 20 minutos aproximadamente.
2. Reservar el locote quemado en una bolsa de plástico hasta que se enfríe. Luego, pelar bajo la canilla toda la piel quemada y cortar en tiras.
3. Introducir las aceitunas, la ricota, el queso crema y el huevo en la licuadora y licuar hasta que los ingredientes se hayan mezclado. Agregar un poquito de agua si la mezcla resulta muy seca.
4. Una vez licuada la mezcla, incorporar los locotes (sin licuar).
5. Después de cubrir el molde para tarta con la masa, añadir el relleno. Espolvorear con orégano y llevar al horno por 25 minutos o hasta que el relleo quede firme al tocar con los dedos.