Me rehúso a vivir en un mundo donde la mandioca sea solo un acompañamiento, un ingrediente de una masa, una poco valorada actriz de reparto en cada asado dominguero. Que no falta, no falta, pero siempre hervida con sal, empujando chorizos; acompañando el caldo y sobrando y salvando chamburreados desde épocas de antaño. Siempre en segundo plano; salva la peli pero nunca aparece primerita en los créditos.
Hoy propongo que sea la estrella; el centro del universo del almuerzo, la reina de la mesa recién puesta.
Por algo la frase más paraguayo que la mandioca, porque a pesar de su aspecto tosco y carácter sencillo, que hasta pasa desapercibido; posee un espíritu noble, está en todas, cuando todo lo demás falta, está, firme, incondicional. Así es. Así somos por acá.
Ensalada de mandioca Imprimir
20 min
40 min
Una hora
- 300 gr de mandioca hervida
- Media cebolla morada
- Un locote rojo
- Un locote verde
- 100 gr de Queso Paraguay
- Un mazo de perejil
- Un mazo de cebollita
- Tres cucharas de mostaza
- 5 cucharas de aceite de oliva
- Jugo de un limón
- Una cuchara sopera de orégano
- Una cucharita de ajo en polvo
- Combinar en un bol la mandioca, cebolla, locotes, queso, perejil y cebollita.
- Mezclar en un frasco mostaza, aceite de oliva, limón, orégano, ajo en polvo, sal y pimienta. Agitar bien hasta que emulsione.
- Agregar la vinagreta y mezclar bien. Dejar reposar en la heladera por lo menos media hora para que quede todavía más rico.
