La guerra del pan dulce data de tiempos medievales. Esta batalla épica entre defensores de las frutas abrillantadas, lacayos de las chispas de chocolate y herejes mercenarios que le ponen Nutella a todo resurge cada 25 de diciembre, donde este pan de los dioses es protagonista de nuestra navidad de flor de coco.
Hoy, a largos meses de que termine el año, me pregunto ¿por qué no puedo comer pan dulce un 4 de abril? ¿Existe una ley tácita sobre ciertos platos que sólo se preparan en diciembre? ¿O comió alguien alguna vez vittel toné o lengua a la vinagreta un martes cualquiera?
La verdad es que nunca cociné un pan dulce de verdad. Siempre le tuve un respeto silencioso a esas recetas que sólo las grandes cocineras añejas de la tele pueden llevar a cabo sin quemar la casa.
Bueno, hasta la Navidad pasada, cuando me animé a dar un pequeño paso hacia el Señor Pan Dulce con unas cookies que engloban todo su sabor a fiesta, con frutas, nueces y esencias que nos transportan directamente a nuestro caluroso y enfiestado diciembre.
Son un regalo genial envueltos en papel celofán rojo. Y son una locura para merendar hoy mismo en celebración de que (por suerte) nos quedan aún unos meses antes de que empiece una vez más la locura navideña.
- 2 huevos
- 2 tazas de harina 0000
- 2 cucharadas de maizena
- 1 cucharita de bicarbonato de sodio
- 1 taza de azúcar morena
- ½ taza de azúcar blanca
- ½ taza de almendras
- ½ taza de nueces mariposa
- ½ taza de frutas abrillantadas
- ½ cucharita de sal
- 1 cucharita de ralladura de naranja
- 2 cucharitas de esencia de panettone
- 160 gramos de manteca
- Una clara de huevo
- 50 cc de azúcar impalpable
- ½ limón
- En un bowl, mezclar la harina, la maicena, el bicarbonato y la sal.
- Derretir la manteca y dejar enfriar a temperatura ambiente.
- En otro recipiente más grande, mezclar la manteca derretida con el azúcar y batir con batidora de mano durante un minuto. Agregar los huevos, el extracto de panettone y la ralladura de una naranja. Mezclar hasta obtener una mezcla homogénea.
- Agregar de a poco los ingredientes secos, y una vez combinados, incorporar mezclando cuidadosamente las nueces, almendras y frutas abrillantadas.
- Cubrir con un paño y guardar durante media hora en la heladera.
- Precalentar el horno a 180 grados y con la ayuda de una cuchara pequeña, hacer pequeñas bolitas de masa.
- Colocar las bolitas en una placa para horno con papel manteca y cocinar las galletitas durante 10 minutos, o hasta que hayan crecido, los bordes estén un poco dorados y el centro aún parezca un poco crudo.
- Cada horno es distinto, por lo que recomendaría realizar una prueba de una o dos galletitas hasta llegar a la consistencia deseada.
- Mientras tanto, mezclar en un bowl pequeño la clara de huevo con el jugo de medio limón. De a poco ir agregando el azúcar impalpable mezclando todo el tiempo con una cuchara de madera hasta obtener una textura suave.
- Una vez frías las galletitas, decorar con el glaseado. Son más ricas consumidas al instante, pero si se guardan en un recipiente hermético, mantienen su frescura por varios días.
